¿Qué es el LaHoChi?

LaHoChi: terapia energética para sanar desequilibrios

El LaHoChi es una terapia holística de sanación energética que reporta múltiples beneficios a las personas que la experimentan. En una consulta de LaHoChi, ya sea presencial o a distancia, quien recibe la sanación es capaz de sentir de forma casi inmediata una profunda relajación. Posteriormente, será capaz de percibir y ser consciente de otros beneficios. Por sí sola, es una terapia de gran potencia y acompañando otras terapias, como la Osteopatía, potencia sus efectos sanadores.

La palabra LaHoChi es la conjunción de las palabras taoístas:

La = luz Divina (sin ninguna connotación religiosa) Ho = movimiento Chi = el Qi, la energía

LaHoChi, por tanto, representa “la luz que pone en movimiento la energía del ser”.

El Chi o Qi

El Qi (o Chi) es la energía vital (el soplo) que fluye dentro de todo. Todo tiene Qi, humanos, animales, vegetales o minerales, y también las construcciones. El Qi se desplaza en el medio ambiente soportado por los diferentes elementos de la naturaleza, entre ellos el viento y el agua (Feng Shui).

La noción de Qi forma parte del concepto del Universo de los taoístas. Para ellos, “todo ser y toda cosa resulta del Qi del Cielo y de la Tierra”.

El Universo entero está únicamente hecho de Qi, otra manera de decir que todo está interconectado.

Mover y canalizar el Qi es de gran importancia en nuestro microcosmo humano dentro del macrocosmo, los dos en cambio permanente. El mantenimiento de la salud física, mental y emocional depende de la capacidad de “recargar la reserva" de Qi en unos puntos claves y de la posibilidad de liberar los bloqueos o sus excesos de concentración para su libre circulación.

En el LaHoChi, el Qi se canaliza desde lo más alto, lo que le confiere unas cualidades que son el resultado de su recorrido positivo. Actuará de forma sutil limpiando memorias en el cuerpo físico, liberando y sanando los bloqueos que se puede ir encontrando a su paso. Esta energía fluye respetando el orden universal.

Entonces, más concretamente, ¿qué hace el LaHochi? El LaHochi facilita el fluir del Qi, canaliza esa energía sanadora, asegurando una buena circulación de la misma y una redistribución energética equilibrada en la persona. Así, se busca el equilibrio del Qi. De hecho, desde hace miles de años, terapias y técnicas tradicionales chinas se orientan hacia la búsqueda de ese equilibrio del Chi que es, en última instancia, el equilibrio del Yin Yang de la vida.

Cuando una persona recibe un tratamiento Lahochi percibe, en primer lugar, una sensación de profunda relajación porque es capaz de notar la energía LaHoChi desde los primeros instantes. Es importante que, en este punto, la persona dé permiso primero a la energía sanadora y luego a sí misma para dejar fluir sin apegos lo que está viviendo y experimentando.

Con el paso del tiempo y tras varias sesiones de esta sanación energética, se van desarrollando cada vez más las percepciones y las capacidades y se irán instaurando cambios sutiles. Ante situaciones difíciles o conflictivas, mal gestionadas en el pasado, la persona percibirá cómo sus reacciones y actitudes ahora son diferentes, después de haber vivido un tratamiento LaHoChi.

LaHoChi presencial o a distancia

Para canalizar el Qi y favorecer el equilibrio de esta energía sanadora, no es imprescindible un contacto directo.

Por supuesto, las sesiones LaHoChi se pueden realizar de forma presencial en un formato clásico: terapeuta y paciente en una consulta.

Y en tanto que terapia holística y energética, las sanaciones LaHoChi también se pueden realizar a distancia a través de cualquier medio técnico con imagen y sonido: Zoom, Skype, Google Meet…